Apple no obtendrá un asiento en la junta de OpenAI después de todo: ¿Qué significa esto para el futuro de la inteligencia artificial?

Apple no obtendrá un asiento en la junta de OpenAI después de todo: ¿Qué significa esto para el futuro de la inteligencia artificial?

**Apple dejará de recibir un papel de observador en OpenAI, fabricante de ChatGPT**

En un sorprendente giro de los acontecimientos, Microsoft ha renunciado a su asiento de observador en la junta directiva de OpenAI, el fabricante de ChatGPT, y se espera que Apple haga lo mismo, a pesar de incorporar la tecnología de inteligencia artificial en Apple Intelligence.

**La retirada de Microsoft y Apple**

Según múltiples fuentes, incluido el Financial Times, Microsoft ha decidido retirar a su observador. Una fuente con conocimiento directo del asunto afirma que Apple tampoco ocupará un puesto en la junta directiva.

**Presiones regulatorias**

La decisión de Microsoft y Apple se cree que está relacionada con la presión de los reguladores globales. En particular, las autoridades de Estados Unidos y la Unión Europea están examinando la asociación de OpenAI con Microsoft.

**Reacciones de Apple y Microsoft**

Apple no ha confirmado oficialmente que renunciará a su asiento en la junta, ni ha comentado sobre el informe. Por otro lado, Microsoft anunció su decisión a través de una carta a OpenAI, notificando a la compañía que su retiro de la junta sería «efectivo de inmediato».

**Nuevas medidas de OpenAI**

Un portavoz de OpenAI informó que en lugar de tener observadores en la junta, la empresa organizará reuniones periódicas con sus socios. Entre estos socios se encuentran Apple, Microsoft y las empresas de inversión Thrive Capital y Khosla Ventures.

**Opiniones sobre la regulación**

Sam Altman de OpenAI ha expresado anteriormente que la inteligencia artificial corre el riesgo de ser sobre regulada, especialmente por la Unión Europea. En 2023, mencionó que OpenAI podría retirarse por completo de la UE debido a esto.

Al final del día, la decisión de Apple y Microsoft de abandonar sus roles como observadores en OpenAI muestra la creciente complejidad y escrutinio que rodea a la inteligencia artificial y las regulaciones que la rodean. Esta situación plantea preguntas sobre el equilibrio entre la innovación tecnológica y la seguridad regulatoria en un mundo cada vez más digitalizado.



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